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La Inspiración de Dios

Capítulo 2

El Gran Sol Central, que forma la esencia fundamental de las Galaxias a las cuales pertenecemos, ha completado la exhalación en el gran ritmo de la Creación Cósmica. El Gran Sol Padre Madre de nuestra Galaxia, conocido como Alfa y Omega, tiene en su órbita a incontables Seres Celestiales, de tal magnitud y desarrollo espirituales, que asombrarían a la imaginación de la mente mortal. De esta tremenda Selecta Corte, son elegidos de una sola vez, para la iniciación del Sol, Siete Pares de Seres Divinos, y a estos Seres, en su gloriosa iniciación cósmica, el gran Dios Madre-Padre les da la Corona, el manto y el Cetro, y son enviados simultáneamente a construir siete Sistemas Planetarios, mediante el poder de Sus Propios Centros Creativos de pensamiento y sentimiento. 

Después que los Siete Soles, con la asistencia de los Eloha, han desarrollado los planetas de sus Sistemas, y han admitido y asegurado a los Seres que deben evolucionar en ellos, se mueven hacia abajo y hacia fuera, hasta que el primer Sol, desde el Sol Central, haya llegado a la periferia del orden cósmico, que es el punto más remoto de la exhalación. En ese momento tiene lugar un cambio en las corrientes de los Padres o Sol Central, y los Soles son atraídos juntos con sus hijos planetarios, en el mismo ritmo, dentro del corazón del Padre. 

Tan lejos como a nuestra Galaxia le concierne, nosotros estamos ahora en la inspiración, y esa es la razón por la cual la iniciación de la Tierra y de todos los planetas son dirigidos hacia el cumplimento del Divino Edicto, en la elevación y redención de los Soles, los Planetas y la gente,  mientras retornan al Hogar y Corazón de Eterna Vida. 

DESCRIPCIÓN DE DIOS MADRE-PADRE 

Describir la belleza del Dios Madre Padre Cósmico de nuestra Galaxia, requeriría de un vocabulario con mucha más delicada percepción que la actualmente disfrutada por el hombre. Este glorioso Dios Padre Madre puede ser visualizado como la más hermosa de las bellezas, sus cabellos platinados, su piel de alabastro, su manto de autoridad del más puro blanco resplandor, su entero Ser representa el máximo de Encarnada Luz y Llama, suavizada y atemperada por el perfil y diseño que podría ser disfrutado por otros. 

Los que hemos sido testigos de las iniciaciones, según las cuales a un Par de Exquisitos y Perfectos Seres se les otorga el privilegio de experimentar con los poderes creativos del Sol, son fuertemente impresos con la transmisión, dentro de las manos del iniciado,  del Cetro del Poder, investido con el magnético centro de amor y el ritmo correspondiente al lugar que tendrá el Sol en el Sistema Solar. Esto está íntimamente conectado con el latido del corazón de todas las corrientes de vida que encarnarán y madurarán en una cadena particular. Esto forma la magnífica atracción que sostiene a las almas dentro de la órbita de ese Sol y Sus Planetas, y mantiene a nuestro Sol, en una apropiada y permanente ubicación en la Galaxia en movimiento, a la que pertenecemos.  

Cuando nuestro particular Sol – Helios y Vesta – envió a los Eloha a construir y crear los planetas, a cada uno le fue dado un magnetizado Cetro, desde el cual se forma el Cetro Cósmico de nuestro Sistema. Ese cetro permanece con el Señor del Mundo durante todo el tiempo en que el planeta es poblado por la vida en evolución. El Cetro para el Planeta Tierra estaba a cargo de Sanat Kumara hasta que retornó a Venus, y ahora está al cuidado del Señor Gautama y sostenido dentro de las cámaras secretas de Shamballa durante la mayor parte del año, siendo expuesto en ciertas ocasiones místicas. 

Los Cetros que llevan las coronadas cabezas de la Tierra, son símbolos de esta Divina Autoridad, que se manifiesta en las corrientes de vida Guardianas de la gente, y el poder magnético que corre a través de la columna vertebral de cada individuo, es una réplica del poder investido descrito. 

Si ese Cetro Cósmico fuera sacado del Planeta Tierra, los cuerpos de la gente volarían por el espacio, y las almas que están actualmente en los planos de los desencarnados  se perderían en el Universo. ¡Verán entonces cuál es la real importancia que tiene su magnético poder! El Cetro contiene dos esferas, que representan los aspectos positivo y negativo del poder de la vida.  Cuando es colocado sobre la pirámide que lo sostiene en reposo, está en perfecto equilibrio. Un extremo de este gran Cetro representa la atracción de gravedad, que es en sí mismo una bendición para los no despiertos. Cuando es invertido, a través de la actividad de la propia vida del individuo, representa la Ascensión. 

A través de la columna vertebral de todo hombre, ambas actividades trabajan constantemente, el arco de energía eléctrica descendente que ancla el cuerpo a la superficie de la Tierra, y la poderosa corriente de energía ascendente que le permite mantenerse erguido, moverse y no estar echado sobre el piso. Cuando la actividad de la vida se carga más poderosamente en el arco ascendente, llegamos al punto en donde la atracción de gravedad de la Tierra no puede sostener por más tiempo a la corriente de vida y la Ascensión es posible. Para cada persona que llega al punto de ascender de la rueda de nacimientos y renacimientos para no retornar más, este Bastón de Poder es traído por el Maestro que preside y Su Poder magnetiza la elevante corriente y asiste a la real liberación de la corriente de vida de la atracción gravitatoria de la Tierra. 

SÓLO DOS ACTIVIDADES DE VIDA 

¡Existen sólo dos actividades en toda vida! Es tan simple y sin embargo tanto ha sido entretejido en y alrededor del estudio del misticismo y autocontrol. ¡Existen sólo el INSPIRAR Y EL EXHALAR! Existe la MAGNETIZACIÓN (la inspiración) de los regalos y poderes de la Divina Presencia, y luego su RADIACIÓN (la exhalación). Ambas actividades tienen lugar a niveles cósmicos con respecto a sistemas solares, galaxias y universos enteros.  

Nos esforzaremos para mostrarles algo de este Esquema Cósmico, a fin de que puedan entender el lugar en el cual se encuentra no sólo nuestro Sistema Solar, sino también nuestra Galaxia en el momento actual. En la EXHALACIÓN, cuando la creación tiene lugar, el Sol Central de un Sistema, exhala los Soles desde su propia Aura. Cada Sol, a su vez, exhala los planetas destinados a ser parte del sistema solar. Esto comprende una expresión de la exhalación de la Deidad con respecto a una galaxia y a un universo solar.

Al final de un “día cósmico”, el Gran Sol Central de ese sistema, notifica a todos los Soles que le pertenecen que es tiempo para la inspiración de Sus Planetas, en preparación para la inspiración de todos los Soles y sus Planetas de regreso dentro el Corazón del Gran Sol Central. 

La Grande y Poderosa Vesta, Dios Madre de nuestro Sistema Solar (nuestro Sol), lo ha explicado así:

 

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