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Discurso
Un Ejemplo del Divino Fluir de la Energía
Cuando miramos el fluir de la energía moviéndose desde el Corazón de la Presencia hacia nuestro corazón físico, observamos un magnificente, pulsante río de prismática Luz. Si aminoráramos la acción vibratoria de esta energía de vida, veríamos que los electrones que forman la Llama de la Presencia llevan un distinto diseño que difiere de todos los otros, así como la perfección geométrica de cada copo de nieve es única.
El mundo externo ha tocado este conocimiento en su explicación científica del magnetismo personal, pero ella se refiere al efluvio que cubre las partículas de pura Luz; sin embargo nosotros nos referimos a la original estructura de vida y energía interna. Si bien esta energía está recubierta por nuestros cuerpos de pensamientos y sentimientos antes de ser enviada al universo, ella continúa llevando el original diseño de la corriente de vida.
Esta incrementada energía puede ser enviada mediante un apretón de mano y el individuo que acepta este saludo recibe sobre su palma – superpuesta a su propia energía de vida – miles si no millones de diminutas formas que representan a la corriente de vida del dador inicial. Estas diminutas partículas continúan expandiéndose hacia afuera, quizá mediante el peinado del propio cabello o el tomar otra mano, creando una interminable cadena de energía que constantemente sale hacia todas partes del universo.
La manera en que estas partículas son cargadas mientras se mueven a través del universo, determina el efecto final sobre la corriente de vida que originalmente las envió. El sentimiento dominante de la energía de estas partículas recogidas establecerá si esta retornante energía será de amistad, amor, respeto o de menor vibración.
Si miraran a ese individuo con vuestra visión interna, verían los electrones constantemente saliendo y retornando en siempre incrementados, interminables, fluyentes círculos, que muy rápidamente crean cambios en los vehículos de aquellos que los envían. Está bien recordar amados, que de acuerdo a la manera que uno haya enviado estos electrones y diminutas partículas, así nos retornarán revestidos con felicidad o sufrimiento.
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Donde Vean Imperfección, Vean Sólo Oportunidad
Permitan a vuestros labios articular sólo palabras que brinden confianza, esperanza y confort, y no lleven a la mente de otros un distorsionado concepto de vida. Vuestros oídos deberían estar sintonizados para escuchar la señal de la Única Universal Conciencia, la Palabra, y el Mensaje y así podrían también escuchar el llamado de vuestros compañeros. Vuestras manos podrían bendecir, ya que debieran ser un signo de amistad; un golpecito sobre el hombro, una mano que ayuda a través de vuestra vida, pueden hacer más fácil la vida de otros. Vuestros pies deberían ser consagrados para llevar vuestro cuerpo hacia adelante a fin de rendir servicio a la vida, y vuestro total vehículo debería ser un instrumento a través del cual la Única Universal Conciencia pueda ser expandida por todo el universo.