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Las Cartas de Shamballa

VOLUMEN II, Número 34                                                                                                   Agosto 19, 1980

 

Amada Madre María

La facultad del Maestro Ascendido que lo capacita a percibir y proyectar Pensamientos de Dios, así como también ser conocedor y aceptar el Pensamiento de Dios con respecto a toda forma manifiesta y creada, lo capacita a vivir en el Plano de la Perfección, disfrutando y sirviendo a la Vida así divinamente proyectada.

 

Como saben, la Conciencia de Dios y del hombre son de diferente vibración, y es para permitirles una más amplia fortaleza a vuestra habilidad de funcionar desde la Conciencia de la Realidad – el Divino Principio de Vida - que Yo amorosamente les presento lo siguiente para que lo repasen… una Ley que intelectualmente conocen pero que aún no han puesto en práctica en la vida diaria.

 

Es la presunción del hombre elegir la percepción de otro Universo que el proyectado por Dios, lo que ha creado y sostenido en la conciencia humana el error, la falla, el malestar, la imitación y la así llamada muerte.

 

Se ha dicho que Dios creó todas las cosas y ellas fueron Buenas. La Divina Idea entonces para el Planeta Tierra, la gente de la Tierra y el medio ambiente y entornos naturales en los cuales ellos se desarrollaran fue un perfecto, indestructible, imperecedero ser. El hombre mirando a este Universo eligió formular independientes opiniones con respecto a este Divino Cuadro y en lugar de mirar al Universo como Dios lo miraba, él creó mediante su propia facultad imaginativa una distorsión de la Divina Idea Original.

 

El Maestro Ascendido elige voluntariamente considerar a la humanidad, el Planeta Tierra y el Universo como Dios mismo lo hace. Él crece unido, a través de la contemplación, devoción y amor por el Padre, a la verdadera idea sobre la cual el Universo y su gente fueron fundados. Cuando su propia Conciencia se fusionó con la Divina Identidad y comenzó a ver a cada hombre como Dios lo ve, su poder individual de proyección reforzó la Divina Idea e intensificó la Perfecta Primera Causa a través del medio de su propia Sabiduría.

 

Si pudiesen activamente elegir amar a Dios, uno de los primeros ejercicios es sentarse antes de toda actividad, todo tratamiento y servicio, y encontrar, abriendo vuestra conciencia, la esencia Espiritual del Dios siempre Presente, lo que es la Divina Idea detrás de cada forma humana y su servicio. Entonces ustedes podrían ver a la gente, actividades y manifestaciones, no como ellos se ven a sí mismos o como vuestra conciencia humana los percibe, a través de un doble velo y su mente externa, sino a través de la Conciencia de Perfección… entonces la fuerza de vuestra conciencia estaría sumergida con el Cristo interno que les permite focalizar esa Perfección dentro de la sustancia que parece recalcitrante… y lo más importante, desde la Conciencia de vuestro Verdadero Ser ustedes no estarían inconcientemente atados ni aceptarían esa mal calificada energía en vuestros seres individuales.

 

Yo amorosamente les aconsejo que contemplen esta simple presentación – que es una revisión de una Lección Esencial que todavía tienen que aprender y a través del conocimiento, pónganla en práctica.

 

 

 

 

 

 

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