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Las Cartas de Shamballa
VOLUMEN II, Número 2 Enero 8, 1980
Amado Arcángel Jophiel
Queridísimos
fieles co-servidores en la Luz, como el Espíritu Envolvente de este año no sólo
tengo el honor de envolver la Forma-Pensamiento sino que es mi gran privilegio
acunar la Tierra y todas sus evoluciones en la tan necesaria esencia de la llama
de Divina Iluminación. ¡Oh, cuán requerida es esa Virtud!
Así Yo les
suplico hoy que pongan su atención diariamente en los poderosos Sponsors del
Año, los Soles Dioses Helios y Vesta y el propio Espíritu del Elemento Fuego, el
Señor Xerostra, a fin de que tenga lugar una intensificada actividad del Fuego
Violeta y mientras la purificación se manifiesta, las conciencias de la
humanidad serán abiertas y realmente aceptarán la Divina Iluminación.
Cuando piensan
en la Divina Iluminación que les llega a la mente, ¿Qué está sosteniendo vuestra
conciencia? Debería estar colmada con el deseo de hacer la Voluntad de Dios,
que, les hemos dicho, llega a través de la Divina Iluminación. Cuando la mente
humana ha sido muy purificada de algunos conceptos de una naturaleza negativa y
la atención está firmemente anclada en la mente Divina, ¡esa elevada conciencia
es vuestra verdadera Realidad!
¡Completamente
un logro dicen ustedes! Verdad, pero en esta escuela de la Verdad a la cual la
conciencia ha sido expuesta estos muchos años, ha llegado la hora para aceptar y
poner en práctica los Principios de la Ley Espiritual que han sido y están
siendo presentados a ustedes para vuestra iluminación por los Seres de Luz que
han prometido todo lo suyo para la restauración de este planeta.
La mano del
Divino Principio de Vida está dirigiendo su dedo cósmico al Planeta Tierra en
una no incierta manera, emitiendo edictos, los que deben ser aceptados y
obedecidos por toda vida. Hasta ahora hemos repetidamente dicho que estamos en
los últimos días en lo que concierne a la evolución de esta Tierra y sin hacer
errores esa verdad se manifestará… y ¡nosotros requerimos y esperamos vuestra
más amplia y dedicada cooperación!
Oh, hijos, mis
queridos hermanos y hermanas caminando esta Tierra, acepten el Amor con el cual
los estoy abrazando y sepan que Yo soy profundamente conocedor de las pruebas
individuales a las cuales están siendo sometidos. Estas son las pruebas de Fe,
Entendimiento, Compasión y ciertamente de inamovible constancia de servicio.
Todas son necesarias para reforzar el “acero” de vuestro espíritu.
Es tiempo, la
hora está a mano, Dios en Misericordia está en maravillosos modos realizando los
así llamados milagros. Yo humildemente les aconsejo aislar vuestros vehículos de
las insidiosas acciones negativas de miedo… sabiendo que caminan con ustedes,
siempre a vuestro lado, los Miembros de la Jerarquía Espiritual y la Hueste
Angélica – apoyen que la Forma-Pensamiento para este año, ese hermoso globo
cristal colmado con el Fuego Violeta requiere de vuestra asistencia, sirviendo
mano y corazón con nosotros, a fin de que se manifieste en toda su radiante
gloria en los doce meses restantes.
Ahora a la
actual Radiación que fluye constantemente desde el magnífico Retiro del Amado
Arcángel Gabriel y la Señora Esperanza… ¡Aquiétense queridos seres y sientan la
gloriosa Radiación de la Virtud Cósmica de la Esperanza, que llena cada fibra de
vuestros seres… luego fluye para el beneficio de toda la humanidad!
¿Por qué piensan
que la Llama de la Esperanza es el pulso inicial de este año? ¡Sí, la Toda -
visionaria Ley Cósmica, atestiguando el desasosiego emocional de este planeta en
gran Misericordia, tomó esta tan importante decisión!
Yo creo en
ustedes, en vuestra sinceridad – todo el Cielo cree en ustedes y nosotros
estamos tan cerca como vuestra amorosa atención. Yo extiendo mi mano, la cierro
y siento la fuerza de la Luz de Divina Iluminación que va a través de vuestro
ser cuando hacen así. Recuerden también que mi Amada Señora Constanza está
siempre deseando y ansiosa de envolverlos en su reunido momentum de la Llama de
la Constancia. ¡Ustedes necesitan su asistencia… pidan y libremente recibirán!
Amado Jophiel
Arcángel de la Iluminación.